El cuidado de sí y los demás - El Corazón al ritmo de la Tierra - Ensayos por Leo J. Laguna

 

* El Cuidado de sí y los demás








*Ensayo síntesis reflexiva Leonardo J. Laguna



 *     “El corazón al ritmo de la tierra” Aiton Krenak

Dice el filósofo Aiton Krenak en su relato: "Cuando yo tenía ocho o nueve años de edad, estaba en el huerto, un lugar que me gusta mucho, y allá estaba también una bonita yegua salvaje que le habían regalado a mi hermano. Ella comía maíz mientras yo limpiaba el huerto con un rastrillo. Mientras la yegua roía las mazorcas, pasé el rastrillo cerca y sin querer la asusté. Ella me dio una parada bien dada, en la boca del estómago, y me hizo volar unos tres metros. Yo no podía respirar, pero me recuperé enseguida. Y allí, de una manera totalmente atemporal, como si fuese un rayo, aprendí una lección sobre los límites y al mismo tiempo comprendí que nosotros podemos actuar en el mundo. Fue una revelación que me llegó como un mantra: 'Sí, nosotros podemos mucho, pero no todo'. Una enseñanza recibida en fricción con la naturaleza.

Esa libertad que tuve en la infancia, de vivir en conexión con todo aquello que percibimos como naturaleza, me permitió entender que yo también soy parte de la naturaleza. Entonces, el primer regalo que me dio esa libertad fue poder confundirme con la naturaleza en un sentido amplio, entender que yo soy una extensión de todo y tener esa experiencia del sujeto colectivo. Se trata de sentir la vida en los otros seres, en un árbol, en una montaña, en un pez, en un pájaro, e involucrarme con eso. La presencia de los otros seres no sólo se suma al paisaje del lugar que habito, además modifica el mundo. Esa potencia de percibirnos como seres que pertenecen a un todo y pueden modificar el mundo podría ser una buena idea de educación. (...)

Las niñas y los niños indígenas no son educados, sino orientados. No aprenden a ser vencedores, porque para que unos venzan otros tienen que perder. Aprenden a compartir el lugar donde viven y lo que tienen para comer. Tienen como ejemplo una vida en la cual el individuo no cuenta tanto como lo colectivo. Ese es el misterio indígena, un legado ancestral que pasa de generación en generación. Lo que nuestros niños y niñas aprenden desde muy temprano es a poner el corazón al ritmo de la tierra."  

 

*      Cuidado y Da sein

 

El cuidado es una noción muy importante que ha sido trabajada tanto por la filosofía y por la psicología y ciencias humanas. Así como Krenak nos relata su cosmovisión y su unión con la naturaleza ubicamos en esta ontología una ética del cuidado. El “cuidado” como idea filosófica es una noción muy antigua que está emparentada con el “Conocimiento” de sí. La famosa frase del oráculo de Delfos tan renombrada y citada por varias filosofías “Conócete a ti mismo”. El conocer va unido a la noción, incluso más antigua del “cuidado de sí”. Siendo la idea original del oráculo “cuídate para conocerte mejor, y conócete para cuidarte” Para conocerse hay que cuidar de los aspectos vitales personales, de uno/a y de los otrxs, un cultivar los asuntos de la existencia, alojar nuestra presencia, y la de lxs demás.

La existencia es y conlleva “voluntad de cuidado”, cuidado y conocimiento se alimentan, el conocimiento de sí misma (o) y como cuidadora (or) del ser y de ese otro ser en el mundo en una relación de alteridad vincular con el/la semejante, y para con los asuntos mutuos de existencia en el mundo.

La noción de Dasein es una expresión alemana que significa "ser- ahí", "aquí", "allí", o “estar siendo allí”. Allí es otro lugar que no es el Yo, y tampoco el ser como ente, sino que es un proceso abierto a lo acontecimental vivenciado. Heidegger, un filósofo del siglo XX muy relevante, toma la expresión Da sein, la expresa para comprender la existencia humana en proceso.  Ser uno mismo, en el mundo. Este “estar siendo” en el mundo del ser es a través de la continuidad en el tiempo y en el espacio, es estar ahí… Cuidar, conocer y ocuparse/preocuparse de los asuntos del mundo conlleva Ser cuidado en una dimensión temporal espacial sensible.   

Heidegger refiere que el cuidado, cure o Sorge -en alemán-, significa "cuidar de" y "velar por", preocupación primordial por sí, cuidado de las cosas y al cuidado de otros. Desvelo por "sí mismo", por asumir el destino como un interés existencial, no intelectual. El curarse de algo, empaparse de algo, conocerlo, preservarlo y el procurar por otros son manifestaciones de la cura e implica un hacer con un fin previsto que se expresa en prácticas de cuidado. El cuidado es la práctica existenciaria inicial, más básica, si la cual la humanidad no hubiese sido tal, ni hubiera vivido a lo largo del tiempo en todo el planeta, ni hubiera desarrollado técnica y cultura.



 

*      Una perspectiva ontológico-sensible del ser. L. Boff

 

Para el escritor brasileño Leonardo Boff esta idea de cuidado heideggeriana es la unidad mínima primordial que permite sostener la continuidad de la existencia humana. El filósofo brasileño, entiende a la comprensión del ser humano como “portador de un cuidado esencial”, que conlleva “el sentido relacional de la vida. El cuidado es vital y perteneciente a la definición de lo humano, llegando a afirmar que “hablar del ser humano sin hablar del cuidado no es hablar del ser humano”. El cuidado de sí y de los demás desarrolla una conciencia auténtica, una verdadera apertura existencial, en contraposición a perderse en necesidades mundanas que cimenten una falsa identidad inauténtica.

Cuidar vendría siendo un acto ontológico fundamental y primordial, en la medida en que lo que se cuida es la vida, la existencia, al existente. “Cuidar del tiempo que nos es dado vivir, aceptar su fugacidad y superar la preocupación por lo relativo y lo posible”, permite aceptar que parte de la vida es también la muerte.  El cuidado consiste en acoger la fragilidad de la vida y gracias a ello es posible siempre vivirla de forma alegre”. L. Boff.

Boff presenta el cuidado como paradigma, esto es como un nuevo modo de habitar y estar siendo en la Tierra. Su tesis es que el cuidado, el sostén constituyen “los dos pilares estructuradores de la nueva civilización que ha de venir”. . Así el cuidado se entrama con el rescate de la razón cordial, o la inteligencia sensible, que aspira a equilibrar el logos occidental con el afecto sensible, la vitalidad, la espiritualidad, incluso las experiencias de dolor que resinifican la vida.  Así mismo su interés prosigue en entender la prioridad de “refundar el pacto natural” es decir re-ligarnos con la Tierra en cuanto organismo viviente. Compartir entre toda una conexión con la Casa Común para construir una ética social afectiva, y una “democracia socio-cósmica”. En la misma línea Boff reflexiona sobre los Derechos Humanos que se hallan en concordancia con los Derechos de la Madre Tierra.  El nuevo paradigma nos exige reaprender varias aptitudes, pluralidad de saberes, como los transmitidos por los pueblos originarios, sus artes de salud, su vida en sociedad, sus cosmogonías. La noción de Suma Qamaña, el buen vivir. El cuidado y la preocupación existencial es vista en tres esferas: El cuidado a uno mismo, a los otros, la Tierra y todas sus formas de vida y ecosistemas.  Las tres esferas presentan el cuidado desde la preocupación, la prevención y la precaución. “Cuidar de la Tierra es principalmente cuidar su integridad y vitalidad. Es no permitir que una zona bioclimática o una vasta región se degraden por entero y entren en un proceso de caos destructor […] Cuidar de la Tierra es cuidar su mejor producción, que somos nosotros, los seres humanos. […] Cuidar de la Tierra es, finalmente, cuidar de nosotros mismos, pues somos Tierra que siente, piensa, ama, cuida, venera, y se siente portadora del misterio del universo”…

Asumir el nuevo paradigma del cuidado conlleva una reconstrucción del yo, de la integridad y transformación del cuerpo, la psiquis, los vínculos y relaciones sociales.  También implica transformar la actividad de producción de la sociedad y distribución de bienes. Incluso para Boff, que es teólogo, trae la mención de es vivir una nueva espiritualidad, que requiere superar la concepción de la religión, y ciertas formas de mandatos religiosos.  Boff se muestra desde un lugar un lugar más holístico y no doctrinario.  Su idea de vitalidad, trascendencia, ética, cuidado, espiritualidad se entraman y no están separadas de su idea de Salud.  En similar sintonía con algunas ideas de Ecosofía y de las tres ecologías que plantea Guattari Para Boff, la salud consiste en un equilibrio de cuerpo, mente, espíritu y naturaleza.  




 

 



*     *  Antropología –Psicodrama – Psicoanálisis:

 

Desde la Ética varios filósofos se han referido a una ética del cuidado, Kant considerando a la humanidad como fin en sí misma, y nunca como un medio. Una falla ética contra cualquier persona es por extensión una afrenta a toda la humanidad. Su gran imperativo categórico llama a actuar por el deber como ley ética universal.

 Pasando por el humanismo y otras filosofías encontramos la ética de la alteridad de Levinas, una ética sensible presente y material teniendo en cuenta el rostro del semejante, como marca humana primordial. También autores como Erich Fromm y H. Marcuse plantean la necesidad urgente de una nueva organización social, una transformación de un sistema que es violento, degradante, alienante en las personas, que explota todos los recursos posibles desconectando de las verdaderas necesidades, enajenando y envenenando la propia corporalidad y los vínculos.

Desde el Psicodrama J. Moreno pensó un modelo que se arraiga en el cuidado del semejante. Tanto en su ética, como en la praxis psicodramática se aloja al otro. Además en el desarrollo social y psico afectivo de las personas Moreno plantea encontrarse con un conjunto de átomos sociales y matrices vinculares internalizadas por los sujetos. Vivencias de roles, escenas que organizan identidades y un hacer en el mundo. Para que el desarrollo tenga lugar de maneras sanas, creadoras, espontáneas se precisa para Moreno matrices de cuidado. Puesto que evolutivamente es el adulto el que cuida al pequeño es primordial que ejerza su función de doblaje en crear sentido de los acontecimientos que ocurren en derredor del niño.  El doblaje del adulto cuidador le facilita al niño este proceso de espejamiento y conciencia progresiva de su propio ser existencia. La adquisición progresiva de roles, sostenidos por el yo auxiliar de los adultos, es necesaria para pasar de un rol somático corporal a la complejidad de roles sociales amplios que irá incorporando la persona en sus experiencias de vida en la trama social. Moreno basa su antropología vincular y filosófica en amplios trabajos del humanismo jasídico y en la concepción del “Yo-Tu” del filósofo Martín Buber, dónde el cuidado de los demás, el velar por las necesidades del prójimo, la justicia y solidaridad en la trama social cultural ocupan un lugar central.

Desde la antropología ciertas contribuciones van a rondar así mismo la idea de cuidado. Margaret Mead una antropóloga de las más importantes del siglo XX-, se expresa en relación a lo que considera el surgimiento de la humanidad, a partir del cuidado como noción fundamental de existencia humana. Dice Margaret Mead en una entrevista en el reino animal, si te rompes una pierna, irremediablemente mueres. No puedes huir del peligro, ir al río a beber, ni buscar comida, y te conviertes en una presa fácil. Ningún animal sobrevive a una pierna rota el tiempo suficiente para que el hueso sane. Por ello, un fémur roto, que se ha curado, es la prueba de que alguien se ha tomado el tiempo para quedarse con la persona accidentada, le ha vendado la herida, la ha llevado a un lugar seguro y la ha ayudado a recuperarse.

Ayudar y cuidar a alguien cuando tiene dificultades es el momento en que comienza la civilización”. No se trata de una primera herramienta, ni de un lenguaje altamente desarrollado, la semilla de humanidad comienza en este ejercicio de auxiliar al semejante.

Por supuesto desde el psicoanálisis también varios pensadores han labrado esta idea, uno de los principales es Donald Winnicott, que refiere a las funciones de cuidado y sostén, así como presentación del objeto y organización de la realidad. En especial el sostén hace a las funciones de continuidad afectiva existencial, promovidas por un ambiente facilitador del desarrollo de la naturaleza humana potencial. Sin cuidado no hay posible desarrollo del Self, no hay dignidad, imaginación ni espacio transicional posible como residencia de la vida psíquica. Sin cuidado no hay correa de transmisión de humanidad y conocimiento en el entramado dentro de los espacios de la cultura.

En nuestro país toda una tradición de psicoanálisis más social cultural y vincular ha tomado la idea de cuidado en el marco de una psicología social. Los grupos de los que entendía Pichón Riviere como espacios de cuidado, aprendizaje operativo y salud. Uno de sus discípulos más importantes y comprometidos con las condiciones sociales y materiales de bienestar fue Fernando Ulloa, que se ha referido a la ternura como una idea praxis vital de cuidado, básica para el desarrollo de un sujeto ético de deseo. Se ocupa también de la ternura como concepto político de resistencia frente a la crueldad y los lazos barbarizados en un mundo estallado por el capital. La ternura como fuente pulsional deseante es constructora de consistencia y resistencia frente a las encerronas de la crueldad trágica de las instituciones de nuestro mundo.

 

Así también el filósofo León Rozitchner se ha referido a acciones de cuidado, sostén, ternura, imaginación en su última obra el materialismo ensoñado. Un materialismo sensible, que plantea la importancia del concepto de mater, una matriz primordial existencial, senso afectiva. Cuna de lo materno que se amplifica y nutre al Sujeto. Le permite existencia continuada. Esta fuente material de ensueño es la base del material onírico, de la imaginación, y del proceso primario. Hay un paralelismo entre esta naturaleza amorosa ontológica y la idea de magmas de Castoriadis. Pero León se centra más en los aspectos afectivo vinculares, y en la matriz maternal y femenina como fundamento de la cultura. Es esta matriz primigenia, que es afectiva-corporal-libidinal-social enlazadas en una inmanencia sustancial, la inmanencia del materialismo ensoñado, la que permite devenir un sujeto, -y un sujeto ético, deseante, histórico y político. Sin los cuidados experimentados en esta concepción material vincular del desarrollo no tendrían lugar los núcleos existenciales de self auténtico y su estar creativo en el mundo, junto con la posibilidad de transformar ese mundo y operar sobre fondos de verdad histórica dando lugar a nuevos instituyentes.

 


 



*       +A modo de cierre:

 

Faltan un sin número de autores/as que han trabajado y elaborado explícitamente o no la idea de cuidado, Esta noción es medular, es lo más propio e íntimo que nos caracteriza como especie, y caracteriza nuestra natura cultural deseante, nuestros espacios de silencio incomunicado, que para Winnicott son los espacios sagrados del self, la tela más vulnerable, lo que bajo ninguna circunstancia debería, nunca, ser violentado.  Este cuidado primordial medular va de la mano de un interés por lo vivo palpitante, que incluye a las demás especies y a la Tierra como planeta. En su Ecosofía Guattari lo plantea como propuesta de enlace y praxis sabia sobre todas las ecologías que atañen al planeta. No hay devenir ecosófico sin un devenir político sensible sobre las formas en las que vivimos, y las condiciones de mantenimiento de nuestras existencias en la biosfera. Existencia que anhela expresarse por doquier, existencia que si se la deja ser se produce y re encanta a ella misma. Una autopoiesis de existencia colectiva, que nos lleva a grandes dimensiones de lo posible…

Pero como decía Galeano al principio no importan los grandes pasos para la humanidad, importan los pequeños, las pequeñas cosas que no cambian radicalmente los medios –y modos- de producción, no acaban con la pobreza, no acaban con la crueldad del mundo, pero …

…Quizá desencadenen la alegría de hacer,
y la traduzcan en actos.

Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad
y cambiarla aunque sea un poquito,
Es la única manera de probar
que la realidad es transformable…

… y la vida digna de ser cuidada, sostenida y preservada en el mundo… ♥

   

 

 

 

*      Fuentes bibliográficas:

 

 

*Ailton Krenak: “Futuro Ancestral”.  Taurus, 2024

 

*Leonardo Boff, *“El cuidado necesario" Ed.  Trotta, Madrid. 

*”Los Derechos del Corazón – La Inteligencia Cordial”. Ed. Trotta, Madrid (2012)

 

*Buchbinder, Mario. “Poética de la Cura”. Ed. LetraViva e Inst. De la Máscara. 2001-.

 

*Guattari, Félix, ¿Qué es la Ecosofía? Ediciones Cactus, 2008-.

 

*Laplanche, Pontalis.Diccionario de Psicoanálisis”. Ediciones Paidós.

 

*Rozitchner, León. “Materialismo ensoñado”. Ed. Paidós. 2011-.

 

*Winnicott, Donald, “Realidad y Juego” Ediciones Gedisa. 1979-.

 

*Zuretti, Menegazzo, TomasiniDiccionario de Psicodrama y Sociodrama” Ediciones Ágora, 2018.

 

*Fichas y material de Cátedra “Filosofía & Psicología” del Bachillerato oficial de Jóvenes / Adultxs Maderera Córdoba. 2019- 2024-.



 El autor: 

* Leo J. Laguna - Es Coordinador y especialista en Clínica Corporal, Arte y recursos expresivos por el Instituto de la Máscara. Arteterapeuta, Psicólogo, Deviniendo Psicodramatista y, a veces poeta psico-argonauta 

Docente y Educador Popular

Artivista 

 

 

 

Comentarios

Anónimo dijo…
Que bueno Leo, me encantó el articulo..conocer a 2 autores que desonocía, Boff y Kernak, cuidado de la naturaleza toda..fundamental...y el mensaje final esperanzador
Gracias Hernan Crida